IATA alerta sobre el impacto de la reforma europea de compensaciones aéreas
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) expresó fuertes reservas frente a la reforma del reglamento EU 261 que se debate en el Parlamento Europeo, advirtiendo que los cambios propuestos podrían elevar los costos operativos, encarecer los pasajes y no ofrecer beneficios comprobables para los viajeros. La normativa regula las compensaciones por retrasos, cancelaciones y denegaciones de embarque en vuelos dentro de la Unión Europea.
Según IATA, el Parlamento está revirtiendo avances acordados previamente por el Consejo Europeo, entre ellos la ampliación de los umbrales de compensación: de tres a cuatro horas para vuelos de corta distancia y de tres a seis horas para operaciones de largo alcance. Para la asociación, estos ajustes hacían más eficiente la regulación y evitaban que las aerolíneas optaran por cancelar vuelos para no superar el límite establecido.
La reforma introduce también nuevas obligaciones que, a juicio del sector, elevarían significativamente los costos. Entre ellas figuran disposiciones adicionales sobre el equipaje de mano, mayores requisitos de información al pasajero y una ampliación general de las obligaciones de compensación. IATA sostiene que estas medidas no se basan en evidencia sobre las preferencias reales de los usuarios y que, en última instancia, implicarán tarifas más altas y menos flexibilidad operativa.
El director general de IATA, Willie Walsh, señaló que las cargas regulatorias recaen finalmente sobre los propios viajeros. “No hay servicios ‘gratuitos’. Cada nueva obligación genera costos que finalmente paga el pasajero, incluso aquel que nunca recibe una compensación”, afirmó.
La organización subrayó además que la conectividad aérea europea ya muestra signos de estancamiento. En mercados clave como Francia, Alemania y Países Bajos, el crecimiento de la última década ha sido moderado, lo que, combinado con regulaciones más exigentes, podría limitar la apertura de nuevas rutas y afectar la competitividad regional.
Ante este panorama, IATA llamó a los gobiernos y organismos europeos a revisar el marco normativo, reducir cargas impositivas y promover la adopción de combustibles sostenibles a precios competitivos, con el fin de sostener un entorno estable para el transporte aéreo y garantizar opciones accesibles para los pasajeros.




