Pese a las presiones con los precios, NCL refuerza su apuesta por el Caribe
El mercado de los cruceros continúa creciendo de forma sostenida, impulsado por una nueva generación de viajeros más jóvenes y una mayor demanda de experiencias en el mar.
Según datos de la Cruise Lines International Association (CLIA), cerca de 34,7 millones de personas realizaron un crucero en 2024, cifra que podría alcanzar los 37,1 millones en 2025 y seguir al alza en 2026. En este escenario, las navieras están ampliando su capacidad, especialmente en el Caribe, la región favorita para el 72% de los cruceristas estadounidenses.
Sin embargo, este crecimiento podría traer consigo un riesgo importante. Un reciente informe de Goldman Sachs advierte que la capacidad de cruceros en el Caribe podría aumentar alrededor de un 9% en 2026, alcanzando los 15,9 millones de pasajeros, lo que podría generar una presión a la baja en las tarifas si la oferta supera la demanda real.
La industria ya vivió una situación similar en 2014, cuando la incorporación de 15 nuevos buques y la expansión de rutas provocaron una intensa competencia en el Caribe. A pesar del aumento de la demanda y de la llegada récord de 26,3 millones de turistas, las compañías tuvieron que recurrir a promociones agresivas para llenar camarotes, lo que afectó negativamente los ingresos.
Tanto Carnival como Royal Caribbean reconocieron entonces que el entorno “altamente promocional” en el Caribe impactó sus rendimientos durante ese período. Goldman Sachs estima que, tras aquel ciclo, el mercado tardó cerca de un año en estabilizar los precios, un patrón que podría repetirse a partir de 2026.
Norwegian Cruise Line, la más expuesta al riesgo
Según los analistas, la compañía que podría verse más afectada es Norwegian Cruise Line (NCL). La naviera está incrementando su presencia en el Caribe del 30% al 40% de su despliegue total, lo que supone un aumento interanual del 37% en número de camas, el mayor crecimiento entre las grandes operadoras. Paralelamente, planea reducir su capacidad en Europa en un 6%, quedando aún más expuesta al rendimiento del mercado caribeño.
Su presidente y CEO, Harry Sommer, ha defendido la estrategia asegurando que están ajustando los itinerarios para priorizar la satisfacción del cliente y fomentar la repetición de viajes, con el objetivo de equilibrar la rentabilidad a corto plazo y la salud de la marca a largo plazo.
Pese a ello, Goldman Sachs estima que el ingreso diario por pasajero de NCL podría caer aproximadamente un 1% en el primer trimestre de 2026, y que el crecimiento del rendimiento neto será inferior a lo esperado. Como consecuencia, el banco ha reducido su precio objetivo de la acción de 27 a 23 dólares.




