¿Qué viene detrás del huracán Gabrielle? Dos ondas tropicales mantienen la alerta en el Atlántico
A medida que el huracán Gabrielle se desplaza por el Atlántico abierto, ya como categoría 3, los meteorólogos monitorean dos ondas tropicales que podrían desarrollarse en los próximos días, señales de que la temporada de huracanes 2025 comienza a intensificarse.
La onda más organizada se encuentra en el Atlántico central y genera tormentas eléctricas al suroeste de las islas de Cabo Verde. Los expertos indican que podría evolucionar a una depresión tropical hacia la mitad o finales de esta semana mientras avanza hacia el oeste.
La segunda perturbación se localiza a unas 400 millas al este de las Islas de Barlovento, según informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés). Esta onda podría desarrollarse en una depresión tropical al acercarse a las Bahamas más adelante en la semana.
Gabrielle, que ya se ha convertido en un huracán mayor de categoría 3, continuará girando lejos de la costa este de Estados Unidos esta semana. Aunque no se espera un impacto directo, la tormenta amenaza con generar olas peligrosas y corrientes de resaca.
“Estas olas ya están llegando a la costa este de Estados Unidos, desde Carolina del Norte hacia el norte”, indicó el NHC en un comunicado del 22 de septiembre. “Es probable que estas olas provoquen condiciones de surf y corrientes de resaca que representan riesgo para la vida”.
Hasta ahora, la temporada de huracanes 2025 ha sido relativamente tranquila, con sólo dos huracanes desde su inicio el 1 de junio: Gabrielle y Erin, este último permaneció a cientos de millas de la costa estadounidense en agosto, aunque provocó corrientes peligrosas e inundaciones en partes de los Outer Banks de Carolina del Norte.
Respecto a las probabilidades de desarrollo, la onda tropical ubicada entre Cabo Verde y las Antillas Menores tiene un 70% de posibilidades de convertirse en tormenta con nombre en los próximos siete días, según la actualización del NHC del 22 de septiembre.
Los meteorólogos federales señalan que el sistema podría organizarse en una depresión tropical hacia mediados o finales de semana mientras cruza el Atlántico central. Por su parte, la otra onda tropical se mueve rápidamente a 15-20 mph hacia las Bahamas, con un desarrollo más lento pero vigilado de cerca por las autoridades.




