Alemania: Acusan al presidente de Air Berlin y otros cuatro directivos por supuestos delitos financieros
Alemania. El presidente de Air Berlin, Joachim Hunold, y otros cuatro altos directivos de la compañía están siendo investigados por las autoridades financieras y bursátiles de este país (BaFin), por la compra de acciones antes de que la empresa publicara la adquisición de su rival dba en agosto. Esta compra habría influido luego favorablemente en la cotización en bolsa de Air Berlin.
La Junta Directiva de Air Berlin rechazó las acusaciones, y ha descartado cualquier indicio de criminalidad en las operaciones realizadas por sus directivos.
Junto al presidente y consejero delegado de Air Berlin, en el marco de las diligencias que efectúa la Fiscalía de Stuttgart, también han sido implicados el presidente del consejo de supervisión de la aerolínea, Johannes Zurnieden; tres jefes de sección de la empresa y una sexta persona cuya identidad no ha sido revelada.
En concreto se les acusa de la práctica ilegal conocida como "insider trading", que significa haber utilizado información privilegiada de la empresa para la compra de acciones de Air Berlin por un valor total de 1,5 millones de euros, antes de que fuera publicada la comunicación ad-hoc sobre la compra de dba.
Al rechazar enfáticamente la acusación, Hunold afirmó que "conocer si la cotización bursátil de Air Berlin iba a aumentar tras la comunicación de la asunción de dba y en qué medida, es más que incierto. A principios de junio del 2006 compré por primera vez acciones adicionales, precisamente porque en ese momento finalizaba el periodo de lockup que me imponía el derecho bursátil y porque quería marcar una señal positiva para el mercado. Air Berlin comunicó debidamente estas compras de acciones a los servicios de inspección financieros y las publicó en internet. El BaFin ya comprobó las compras a principios de otoño de 2006 y no hizo objeciones. Y como hasta la fecha no he vendido acciones, tampoco he podido tener beneficios".
Hunold subrayó que Air Berlin coopera con los órganos instructores, interesada en una rápida aclaración de las acusaciones. La empresa admite en su declaración que es cierto que ya en mayo del 2006 se acordó una llamada obligación de guardar secreto entre Air Berlin y dba y que después se inició la comprobación legal y económica de una posible compra de la segunda, pero en ese momento dicha compra aún era altamente improbable. (Fuente: Hosteltur)