Argentina espera sufrir los efectos más fuertes de la crisis en este verano austral
Argentina. La acostumbrada explosión turística en el verano austral tendrá este año una considerable merma como consecuencia de la actual crisis financiera global, opinaron expertos de esta industria. La Cámara Argentina de Turismo (CAT) pronosticó que se espera en el país un 30 por ciento menos de veraneantes en enero-febrero, tanto nacionales como extranjeros, y un 25 menos en la capital, el más importante atractivo para quienes viajan desde otras latitudes.
De acuerdo con declaraciones al diario Clarín de Juan Mirenna, presidente de esa institución, las reservaciones en esos meses del verano austral decayeron sensiblemente en comparación con años anteriores, y es un hecho de que la gente viajará menos en el 2009 para recortar gastos.
En tanto, Hernán Lombardi, titular de la cartera de turismo de la capital, declaró que el panorama no es alentador para la industria, que da trabajo directo a unas 100 mil personas.
Remarcó que a la crisis financiera mundial se suma la pérdida de la competividad del peso argentino en el sistema cambiario.
En tanto, la asociación de propietarios de cafés y bares reportan un 25 por ciento menos de actividad, mientras que la de hostales informa de hasta un 30 por ciento.
Debido a esa situación adversa se creó en la capital un comité de crisis, integrado por representantes del gobierno porteño, del sector gastronómico y de las cámaras empresariales de turismo.
Como consecuencia de la afectación cambiaria, la caída del real en relación con el peso revertirá la fuerte arribazón de los últimos años de turistas brasileños y producirá el efecto contrario, o sea, que los favorecidos argentinos se lancen hacia las playas del gigante vecino.