Centroamérica se presentará en Fitur 2008 como prometedor destino de cruceros
Centroamérica. Los países de esta región, Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá, donde ya ha arrancado la temporada de cruceros con unas previsiones muy positivas, acudirán a FITUR 2008 para mostrar a todos los profesionales de la Feria los numerosos atractivos y propuestas que les han permitido posicionarse como uno de los destinos favoritos para este segmento, al aunar naturaleza, gastronomía, cultura y tradición.
El sector de cruceros es uno de los segmentos con mayor crecimiento en los últimos años a nivel mundial, y Centroamérica cuenta con condiciones óptimas para la atracción de cruceros a la región, gracias a los alicientes que aportan sus paradisíacas playas caribeñas (con la práctica de todo tipo de deportes náuticos), diversidad cultural, gran tradición folklórica, riqueza gastronómica y exuberante vegetación.
Para la temporada actual de cruceros 2007-2008, que finalizará en el mes de mayo, las perspectivas de crecimiento son muy positivas, y según datos preliminares, países como Costa Rica prevén recibir un 7,4% más de cruceros y Guatemala, con una gran oferta cultural, entre la que destaca el Parque Arqueológico de Tikal, espera que lleguen a sus costas 91 cruceros, que atraerán al país a 51.000 turistas.
Respecto a Honduras, los datos indican que arribarán aproximadamente 176 cruceros con 372.361 pasajeros que visitarán principalmente las paradisíacas playas caribeñas de las Islas de la Bahía (Roatán, Guanaja y Utila). En Nicaragua se prevé la visita de 30.262 pasajeros provenientes de 36 cruceros que recorrerán las playas de San Juan del Sur, y en Panamá, el crecimiento se estima en un 33%.
Belice y El Salvador también esperan registrar cifras superiores a las de anteriores temporadas. Todos los profesionales que acudan al stand de Centroamérica podrán conocer más de cerca los alicientes que han posicionado la región en este segmento, con sus Parques Arqueológicos Mayas y ciudades y monumentos coloniales y modernos que contrastan con sus ancestrales culturas indígenas.