Cuba pierde a Robaina y Smith, dos grandes personalidades vinculadas a su desarrollo turístico

Cuba. Abril trajo las desagradables noticias de la muerte del chef Gilberto Smith Duquesne y del cosechero de tabaco Alejandro Robaina, dos conocidas figuras de este país que siempre estuvieron muy ligadas al mundo del turismo, y que sin dudas permanecerán en la memoria de quienes les conocieron.

Smith falleció el 9 de abril, a los 90 años de edad, luego de una fructífera carrera gastronómica que le vinculó de manera especial con las recetas de langosta, mientras que Robaina murió ayer, a los 91, tras ser reconocido como uno de los más famosos cosecheros de tabaco de Cuba.

El jefe de cocina, además de ser Presidente de Honor de la Federación de Asociaciones Culinarias de la República de Cuba (FACRC) ganó muchos títulos de diferentes sociedades del gremio en todo el mundo.

Smith, al morir, era Dr. H.C. Chef, Miembro Honorario de la Asociación Mundial de Sociedades de Chefs, y cocinero de destacadas personalidades culturales y políticas, tanto cubanas como extranjeras.

Además, ganó la condición de Miembro de Honor de la Academia Culinaria de Francia, la Asociación de Restauradores Gastronómicos de las Américas (AREGALA) y la de Doctor Honoris Causa de la Universidad de Poznan, de Polonia.

Entre otros muchos reconocimientos, también contaba con la Medalla de Oro de la Asociación Culinaria de Japón, avalada por el Emperador Hiroito, y la Medalla de Oro de la Federación Alemana dedicada a esta misma actividad.

Fue una figura singular, de dialogo ameno y cargado de conocimientos tanto de culinaria como historia.

Por su parte, Robaina resultó la única persona viva en inspirar una marca de habanos, los Vega Robaina, de mucho éxito en el mercado mundial.

Alejandro Robaina Pereda, nació el 20 de marzo de 1919 en la ciudad habanera de Alquízar. Aunque su familia siempre tuvo, desde el siglo XIX, hacienda en las Cuchillas de Barbacoa, municipio de San Luis, provincia de Pinar del Río, la más occidental de Cuba, y la región tabacalera más relevante.

Desde 1994 Robaina recibe reconocimientos como mejor cosechero de tabaco. En aquellos momentos la Asociación de Cosecheros de Cuba lo nombró Mejor Productor. En 1998, se le galardonó como el mejor productor de tabaco de Cuba y en 2002 alcanzó el título de Hombre Habano del Año, en la esfera de comunicaciones.

Desde que en 1997 comenzó su andadura la marca Vegas Robaina, el mundo cambió para este campesino, que a partir de ese momento se convirtió en embajador del habano cubano, sin abandonar sus labores agrícolas, pero realizando visitas a El Líbano, Egipto, Italia, España, Francia, Suiza, Rusia, Luxemburgo, Argentina y otros lugares, donde siempre fue alabado por su sencillez y trato afable.