España y Brasil se reunirán este martes para tratar de resolver crisis en aeropuertos por temas migratorios
Fuentes: Terra.es/EFE
España. Los gobiernos de este país y Brasil se reunirán mañana martes para tratar de zanjar la crisis suscitada por los casos de viajeros de ambos países que han sido devueltos en las últimas semanas en aeropuertos brasileños y españoles, por no cumplir los requisitos migratorios.
Los ministros de Exteriores de ambos países, Miguel Angel Moratinos y Celso Amorim, acordaron esta reunión antes de Semana Santa, cuando se agravó la situación por las no admisiones y las trabas que ciudadanos españoles y brasileños encontraban en frontera.
En el encuentro participarán representantes de los Ministerios de Exteriores, Interior y Trabajo de ambos países con el fin de abordar la situación entre todos los departamentos afectados, según han informado a Efe fuentes de Exteriores.
La delegación española estará encabezada por la subsecretaria de Asuntos Exteriores, María Jesús Figa, a quien acompañarán los directores generales para Iberoamérica y de Asuntos Consulares.
También asistirán por parte del Ministerio del Interior el Comisario General de Extranjería, el director general de Relaciones Internacionales, así como un representante del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.
A la cabeza de la delegación brasileña estarán el subsecretario general para las Comunidades Brasileñas en el Exterior, Oto Maia, y el embajador de Brasil en España, José Viegas, además de un representante de la Policía Federal, entre otros.
El deseo común es resolver el asunto a través del diálogo en sintonía con la buena relación existente entre ambos países.
También hay disposición a estudiar posibles mejoras en los mecanismos consulares para evitar rechazos que puedan ser injustos, dentro de las condiciones que impone la UE para entrar en el espacio comunitario establecidas en el Acuerdo Schengen.
Aunque los brasileños fueron el segundo colectivo con mayor número de turistas rechazados en el aeropuerto de Madrid-Barajas en 2007, con un total de 2.764, sólo superados por los bolivianos (3.357), España niega que se les esté tratando de forma discriminatoria.
Ante las devoluciones registradas en el presente año, Brasil reaccionó endureciendo los controles para aplicar "medidas de reciprocidad" con España.