FIO, el más importante evento ornitológico del sur de Europa

La Feria Internacional de Turismo Ornitológico de Extremadura (FIO) ha puesto a la región extremeña en el mapa europeo del turismo de naturaleza, convirtiéndose en pocos años en referencia internacional para el sector. Sobre su novena edición que se iniciará el próximo 28 de Febrero, habla para CND el consejero de turismo de Extremadura, Víctor del Moral.

¿Cuáles son los objetivos de la feria?

-La feria, organizada por el gobierno de Extremadura, intenta reunir siempre lo mejor del turismo de naturaleza y la ornitología en un formato de foro abierto: una amplia presencia de empresas  especializadas, instituciones públicas y asociaciones conservacionistas y encuentros entre profesionales del sector, en una programación que combina el aspecto divulgativo y el lúdico, sobre todo con una amplia participación de público en sus actividades: jornadas técnicas, conferencias, talleres profesionales y para niños, rutas guiadas por el campo y observación de aves, entre otras muchas actividades.

El escenario no puede ser mejor: el Parque Nacional de Monfragüe, una de las mecas mundiales para el avistamiento de aves, declarado Reserva de la Biosfera por la Unesco.

¿También se realizará una muestra comercial?

-Sí, además de las presentaciones y debates sobre ornitología tendremos todo lo comercial relacionado con este mundo, como cámaras fotográficas, aditamentos e instrumentos de óptica, ropa, calzado, todo lo relacionado con la pintura, el arte en torno a la naturaleza, así como los espacios naturales donde se pueden avistar aves de toda España, los guías de turismo, y también empresas de hoteles y casas rurales, fundamentalmente en torno a la naturaleza y el turismo ornitológico.

Como novedad, este año hemos recuperado la bolsa de contratación, iniciativa que pretende impulsar los negocios de un sector en pleno crecimiento. Para participar en este punto de encuentro empresarial se ha convocado a agentes turísticos de España, Reino Unido, Alemania, Holanda, Suiza, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Irlanda, Israel, Sudáfrica, Estados Unidos y China.

¿En ese sentido, cómo considera que ha evolucionado la feria al llegar a esta novena edición?

-La feria ha ido dándose a conocer poco a poco y, de hecho, en poco más de ocho o nueve años creemos -y así lo dicen los expertos-, que es la feria de ornitología más importante del sur de Europa. La más importante del mundo es la del Reino Unido y  actualmente en esta región es la FIO. Además, nuestro evento tiene un gran potencial porque se celebra en invierno, pues, como se sabe, en el norte de Europa el clima es mucho más duro, resulta mucho más complicado estar haciendo fotos en plena naturaleza, e inclusive metiéndose en el agua, como hemos visto en la presentación, para lograr hacer maravillosas fotos de pájaros. Pero en Extremadura, como el clima es más benigno, se puede disfrutar de la naturaleza sin las inclemencias del norte europeo.

¿Cuántos espacios naturales existen en la región?

-Tenemos 54 espacios naturales, el 30% de ellos bajo algún tipo de protección ambiental, y, desde luego, el Parque Nacional Monfragüe, Reserva de la Biosfera. No debe olvidarse, además,  que en Extremadura se pueden observar más de 250 especies habituales y más de 360 si sumamos las de presencia ocasional, lo cual es un mayor atractivo para los amantes de la ornitología.

De las cuatro millones de hectáreas de Extremadura, tres millones están incluidas dentro del inventario de Áreas Importantes para las Aves de España, donde se pueden avistar hasta el 35% de las especies europeas. Este potencial permite que la región acoja a más de 20 mil turistas ornitológicos cada año.

Entonces ¿se espera que para este año y los venideros, el turismo ornitológico continúe creciendo?

-Así lo afirman los expertos. Cada año crece entre 10 y 15%. Existe un enorme potencial y lo que tenemos que hacer es abrir nuevas estructuras, nuevas variedades de turismo, pues si la gente acaba buscando otras cosas distintas a sol y playa, ya tendremos un producto creado con instalaciones, con expertos, que pueden reorientar al visitante hacia el turismo de naturaleza, la conservación del medio ambiente y habitar y aprender del medio natural.

¿Y en cuanto a la vertiente fotográfica?

-Es uno de los aspectos que despierta más interés, pues las jornadas que hemos llamado FOTOFIO reúnen expertos nacionales y extranjeros en conferencias y presentaciones sobre fotografía de la naturaleza.

También tendremos el noveno concurso fotográfico sobre las aves de España, que está considerado entre los más prestigiosos del mundo, y cuya dotación de premios se ha incrementado sumando un total de 5.000 euros, con un mayor número de categorías, como la de jóvenes fotógrafos. Además, por primera vez la feria contará con una carpa dedicada a pintores, escultores y fotógrafos de naturaleza, que podrán mostrar y vender sus obras.

¿Este año se amplía la proyección al exterior?

-En esta edición la feria viaja simbólicamente hasta el Japón, a través de su cartel, que incluye como imagen un grabado de la escuela Ukiyo-e (pinturas del mundo que fluye), titulado “Rabilargos en un akebi”, obra de Kono Bairei (1844-1895), uno de los máximos exponentes del estilo Kacho-e, enfocado principalmente en dibujos de pájaros y flores. De esta forma queremos, a través de FIO, tender un puente hacia el Japón y hacia Asia en general, como hicimos el año anterior con América.

¿Cómo conciben este tipo de turismo, dentro de un esquema sostenible?

-Tenemos una importante consejería, la de Medio Ambiente, que colabora directamente con la de Turismo y que tiene los expertos en naturaleza. Nosotros podríamos decir que somos los expertos en turismo, pero hay que conservar primero el medio ambiente, estructurarlo y saber lo que tenemos, y eso lo hacen los expertos de medio ambiente. Luego hay que venderlo turísticamente, sin estropearlo, sin dañarlo, desde un punto de vista de que tiene que seguir dando réditos por muchos años, que en los sitios turísticos al año siguiente no haya menos pájaros sino más.

Lo que ha sucedido en Extremadura en estos últimos tiempos es que, fundamentalmente gracias al trabajo de la consejería de Medio Ambiente, ha crecido el número de parejas  que nidifican en la región, sobre todo las protegidas como el águila imperial ibérica, las cigüeñas negras y los buitres negros, y eso es también gracias a la concienciación de los pobladores.