Gabriel Escarrer: La apuesta por Latinoamérica es incondicional

Esta semana, el presidente de la comunidad de Madrid, Ignacio González, inauguró junto con directivos de Meliá Hotels International  el nuevo hotel Innside Madrid Génova de la compañía en la capital española. Gabriel Escarrer,  vicepresidente y consejero delegado de la cadena, habló sobre este y otros temas en exclusiva para CND.

Señor Escarrer, ¿cuál es el concepto con el que se ha concebido este nuevo hotel de ciudad?

-Siempre digo que, en líneas generales, los hoteleros  hemos sabido tener una buena proposición de valor en las habitaciones, pero hemos dejado de lado las áreas nobles, y entiendo que los hoteles tienen que crecer en algo que se abra a la comunidad, a la gente de la ciudad. Con estos conceptos creativos e innovadores hay mucho que hacer con la restauración, la animación, en fin conseguir ese ambiente que hace que el hotel sea algo realmente innovador y atraiga tanto a la gente de la ciudad como al propio cliente de la instalación.

¿La compañía piensa tener otros hoteles del mismo tipo en Madrid?

-Precisamente, dentro de pocos días abriremos otro concepto igual de la firma Innside, cerca de aquí, en la zona de Luchana, y para fin de año esperamos poder abrir el antiguo hotel Suecia, que estuvo cerrado siete años y que junto con la familia Díaz estamos reconvirtiendo y va a ser un concepto muy similar a este; edificios antiguos que se rehacen con las más modernas instalaciones y facilidades para los huéspedes, pero conservando todo su carácter y aire tradicionales, que les dan una personalidad propia.

Usted definía hace poco a Meliá como una empresa española-latina o latina-española, por las instalaciones que tienen en América Latina Desde ese punto de vista, ¿cómo se sienten con el cierre de los vuelos de Iberia a islas como Cuba y República Dominicana, puntos fuertes de la cadena en hotelería?

-No creo que sea bueno, pienso que de todas formas Iberia tendrá que replantearse esa decisión y anunciar que se volverá a volar a esos destinos. Para nosotros Latinoamérica es nuestro trampolín natural de crecimiento, ya sea por vínculos naturales de idioma o cultura, o porque nos sentimos muy cómodos allá. El año pasado, el 65% de nuestros beneficios vino de Latinoamérica, de manera que casi podemos decir que somos una compañía latinoamericana basada en España.  Pero definitivamente, con más de 29 años trabajando en la zona, con grandes profesionales y grandes equipos, creo que nos la hemos ganado y mucho del desarrollo futuro de la compañía pasará por Latinoamérica.

¿Entonces la apuesta por Latinoamérica se mantiene firme?

-Es incondicional, y no creo que baje en los próximos años, por el contrario seguirá aumentando.

El año pasado a su padre, fundador de la compañía, le otorgaron un premio internacional por la trayectoria de una vida en la profesión ¿Cómo se sienten al respecto?

-Para mí es un orgullo, y aunque quizás yo no sea muy objetivo, creo que hay pocos hoteleros que puedan pasar a la historia y uno de ellos es mi padre, de manera que el hecho de que en sus plenas facultades le hayan dado este reconocimiento es una satisfacción personal como hijo y como consejero delegado de la compañía, pero definitivamente es un reconocimiento a 57 años de arduo trabajo y de creer a tope en el futuro del turismo.