Iberia pesa en resultados de IAG, se anuncia tormenta en diálogo entre compañía y sindicatos
Los problemas de Iberia y el aumento de la factura energética, entre otros gastos, han generado a International Airlines Group (IAG) pérdidas por 923 millones de euros en 2012, frente a un beneficio de más de 500 millones en 2011, informó la empresa el jueves, una jornada en que Iberia convocó a los sindicatos para inaplicar sus convenios, según fuentes gremiales.
Iberia cerró el ejercicio con pérdidas de 351 millones de euros (98 millones un año antes), mientras que British Airways tuvo un beneficio operativo de 347 millones. Iberia fue, además, responsable de varios desembolsos extraordinarios para IAG, debido a las “provisiones para reestructuraciones y los costes del deterioro” de la compañía.
En 2012, los ingresos de IAG aumentaron 11% hasta 18.117 millones de euros, mientras que los costos de combustible se incrementaron 20,4%, hasta los 6.101 millones de euros.
El consejero delegado de IAG, Willie Walsh, señaló que British Airways ya está "viendo el fruto del cambio estructural permanente", pero que Iberia deberá “detener sus pérdidas de caja y ajustar su base de costes fijos de forma permanente”, mientras sienta las bases para un crecimiento rentable en el futuro, “si quiere competir con otras aerolíneas en todos sus mercados estratégicos”.
Tras lamentar que no haya ningún acuerdo sobre el plan de reestructuración luego de tres meses de negociación entre Iberia y los sindicatos, Walsh señaló que se procederá a recortar en 15% su capacidad, iniciado ya el proceso formal de Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a 3.807 trabajadores, el 19% de la plantilla de la compañía española.
Según IAG, los riesgos de ejecución de la reestructuración de Iberia "son altos", incluidos "la implementación tardía, conflictos laborales generalizados, interrupciones de servicio, interferencias políticas, riesgos legales en relación con la implementación provisional de las nuevas reformas laborales y la falta de enfoque de los empleados".
"Existe un riesgo de que la dirección de Iberia y los sindicatos no logren los cambios necesarios en este momento y de que, como consecuencia del prolongado consumo de tesorería, no puedan financiar los cambios necesarios en los ejercicios futuros", advirtió.
En otras declaraciones, el director financiero de IAG, Enrique Dupuy, reiteró que la estructura actual de Iberia es inviable, y subrayó que la rentabilidad de la compañía es un objetivo irrenunciable. IAG, dijo, está dispuesto a valorar otras formas de reestructuración, mientras ello implique recuperar la viabilidad de la empresa española, que no puede permitirse la situación actual, pues de lo contrario "acabará desapareciendo".
Respecto a una posible intervención del gobierno mediante un proceso de arbitraje, dudó de su conveniencia y recordó que otros conflictos laborales terminaron “mal" en el pasado por este motivo.
Los sindicatos informaron el jueves que Iberia les ha convocado para el viernes con el fin de comenzar a negociar la inaplicación de determinadas condiciones de trabajo previstas en el convenio colectivo.
“Nos han convocado para comunicarnos el descuelgue del convenio colectivo, que no quieren seguir cumpliéndolo”, han dicho a Efe fuentes de CCOO, mientras que desde la compañía explicaron que se trata de negociar medidas como reducciones y congelaciones salariales o incrementos de productividad o flexibilidad, con el objetivo de aminorar el número de despidos.
Según el reporte, el sindicato USO interpretó ese paso como “una provocación desesperada”, mientras que para CCOO “se está dinamitando la mediación” y para CTA Vuelo la compañía "en vez de rebajar la tensión, lo que hace es echar más leña al fuego”.
En este contexto, los sindicatos han reiterado su voluntad de seguir adelante con las jornadas de huelga entre el 4 y el 8 y el 18 y el 22 de marzo.
La primera etapa de la huelga en protesta por el plan de reestructuración de Iberia, del 18 al 22 de febrero, costó tres millones de euros diarios a IAG, según cálculos del grupo, y causó la cancelación de un total de 1.200 vuelos: 415 de Iberia, 354 de Vueling, 357 de Air Nostrum y 96 de Iberia Express.
Para los paros de la próxima semana se esperan 431 cancelaciones en Iberia, 100 en Iberia Express, 316 en Vueling y 434 en Air Nostrum, para un total de casi 1.300 vuelos afectados.