Monte Azul: un concepto que combina arte y turismo en las alturas de Costa Rica

A su paso por ITB Berlín, tuvimos la ocasión de conversar con Melissa Matamoros, gerente del estudio y galería de Monte Azul, un lugar muy exclusivo localizado en el monte Talamanca, en Costa Rica. En ese sitio se puede disfrutar del descanso más confortable en un entorno paradisíaco, rodeado de obras de arte originales creadas allí.

Cuéntame ¿cómo surge la idea de Monte Azul? ¿En qué consiste este proyecto y qué es lo que quieres enseñar al mundo?

-Monte Azul es el producto de la visión de dos de sus fundadores, Carlos Rojas y Randall Langendorfer. Rojas es costarricense, criado en los Estados Unidos. Estudió Bellas Artes y siempre quiso, cuando regresara a Costa Rica, hacer un proyecto relacionado con las artes. Los años pasaron y fundó Monte Azul.

Está localizado en la cordillera de Talamanca, la más importante del país, cerca en las faldas del Cerro Chirripó, que es el pico más alto de Costa Rica, a 3.821 metros de altitud, y tiene una reserva de bosques lluviosos. Es un lugar de aguas prístinas, donde los ríos son los más puros porque vienen de su origen glacial, de hace 25 mil años. Un sitio idílico, paradisíaco.

Aquí se desarrolla un proyecto con un concepto bastante complejo, que es combinar el turismo de alto calibre con alto diseño y curado con obras de arte originales realizadas en el estudio de Monte Azul, porque también es eso, un lugar para realizar arte.

Tenemos nuestro propio estudio de arte, un programa de artistas en residencia, donde estos llegan, hacen su propuesta y participan. Además, ofrecemos a los clientes una variedad de actividades única, como talleres de artistas reconocidos, de quesos, de jabones biodegradables hechos a mano, de café, de cocina… este último aprovechando que tenemos un restaurante, Café Blue, que ha sido catalogado como uno de los mejores de Costa Rica.

Nuestros chefs le dan la oportunidad a nuestros clientes de, si les gusta un platillo, que lo cocinen con ellos y después lo degusten. Es una experiencia. No es un lugar para visitar una noche, sino para quedarse, para enamorarse. Yo le llamo la experiencia Monte Azul.

Cordialmente invito a todas las personas que tengan capacidad de llegar a esta información para que visiten Monte Azul y nuestra página web.

¿Cómo ha sido la inclusión de Monte Azul en The Long Run Iniciative?

-The Long Run Iniciative viene de la Fundación Zeitz, cuyo fundador es Jochen Zeitz, quien era CEO de Puma. Es una organización que se dedica a la selección y certificación de lugares con los más diversos orígenes alrededor del mundo, siempre y cuando cumplan con varios puntos principales: primero, que sean privados, y que además se dediquen a las cuatro C por completo, que son comercio, cultura, comunidad y conservación.

Dentro de esas cuatro C tienen que cumplir ciertos parámetros rigurosamente estipulados por la fundación y escrutados. Tanto es así que el período de certificación dura dos años hasta que se obtiene y en Monte Azul realmente estamos muy orgullosos de decir que somos el 0001 de Long Run Destination Certification y estamos avalados como refugio global de la ecosfera número 1 en el mundo. Hemos sido los primeros en obtener esta certificación por ese concepto.

¿Cuál es su target, sus clientes más asiduos?

-Nuestro perfil de clientes son personas de un alto nivel educativo, que han tenido la posibilidad de viajar anteriormente y que se decidieron por cambiar, buscar algo innovador, porque ya están cansados de la misma oferta.

Ellos nos buscan en internet, porque debo decir que la mayoría de nuestras reservas son directas. Se ve que ellos buscan, se preocupan y se informan acerca del destino. Son personas que tienen un estándar de vida un poquito alto, y vienen en su mayoría de los Estados Unidos.

Hemos tenido clientes españoles, de Barcelona y Madrid, pero en su mayoría son de Estados Unidos, especialmente de Nueva York y de California, y de Europa, del Reino Unido y Holanda.

¿Cuántas habitaciones tiene el hotel?

-Monte Azul tiene solo 4 suites para dos personas cada una. Es un hotel muy exclusivo. Eso garantiza completa privacidad. Cada casita –nosotros le llamamos suite a la casita– está equipada con terraza y jardín privado. Es un lugar especial para las personas que quieren irse en una escapada romántica o para lunas de miel. Hemos hecho paquetes especiales.

Durante esta feria hicimos el lanzamiento de siete paquetes turísticos nuevos que incluyen todas nuestras actividades. Es una oferta amplia, para que el cliente escoja y se familiarice con el concepto de Monte Azul e investigue un poquito más acerca de lo que tenemos para ofrecerle.

¿Qué les ha hecho decidirse asistir a ITB en lugar de acudir a World Travel Market en Londres, o a FITUR en Madrid?

-Se debe a que somos parte de The Long Run Iniciative, que somos un destino certificado por la Zeitz Foundation, lo cual ha sido importante para nosotros, porque siendo un hotel tan pequeñito, de solo cuatro habitaciones, no hubiéramos podido venir hasta acá si no hubiéramos sido invitados por la Fundación. Gracias a ellos y a su iniciativa de promoverse por medio de los lugares que han certificado es que estamos aquí. Ha sido una gran cosa y una muy buena idea.

¿Con qué expectativas han acudido a ITB?

-Es importante para extender nuestra red de contactos. Sin embargo, el objetivo principal, lo más beneficioso a lo largo de estos casi cuatro años desde que abrimos, ha sido conseguir que se escriba sobre Monte Azul.

Hemos comprobado que cuando aparecemos en revistas turísticas de renombre en Estados Unidos, las personas nos recuerdan y nos buscan. Es decir, parece mentira, pero todavía en esta época la gente lee revistas físicas, no solo digitales. Entonces, lo que nos interesa es que alguien se interese por nuestro concepto, que se maraville y se enamore de Monte Azul y escriba alguna nota.

¿Algo más que quieras transmitir a los lectores?

-Les diría que visiten nuestro sitio: www.monteazulcr.com. Ahí estamos para servirles y ante cualquier duda que tengan, pueden escribirnos a  info@monteazul.cr.com. Que vengan, que disfruten y que vivan la experiencia de Monte Azul, que es muy diferente.