Rocío Aguirre, Directora de la feria Madrid Golf

Aunque es un evento relativamente joven, que existe desde el año 2006, la IV edición de la feria MadridGolf-Valle Romano confirmó el creciente interés del mercado español por este segmento, pues logró reunir a 347 empresas expositoras en 10 mil 800 metros cuadrados y atrajo un 2,5 por ciento más de visitantes, cifras que resultan muy satisfactorias teniendo en cuenta el entorno de la crisis financiera internacional

Háblenos un poco de la historia de la feria, ¿cómo se ha ido desarrollando en estos últimos años hasta llegar a esta última edición?

-Este año celebramos la cuarta edición. La primera sesionó en el 2006, cuando tuvimos el pabellón 2, con 5 mil metros cuadrados de exposición. En el 2007 doblamos el espacio en el pabellón 6, y el año pasado tuvimos el pabellón 12, que son 13.600 metros cuadrados. Este año cubrimos 10 mil 800 metros cuadrados, con la presencia de muestras de 347 empresas, lo que es un resultado muy bueno, teniendo en cuenta el entorno de la crisis.

Las ferias no surgen espontáneamente, tienen estrecha vinculación con la existencia de determinados nichos de mercado que precisan de promoción y respaldo. ¿A qué atribuyen ustedes el hecho de haber creado esta feria Madrid Golf? ¿Al incremento de los golfistas en España? ¿O a la infraestructura que se ha creado en el país para la práctica de este deporte?

-No había feria de golf. Todas las industrias tienen un lugar y una fecha para reunir a sus profesionales, especialistas y al público interesado en sus productos. En todos los países que tienen más desarrollado el golf, como Estados Unidos e Inglaterra, existe un evento dedicado a esta actividad; así que nosotros nos dimos cuenta de que aquí no lo había. Se hicieron algunos intentos hace 10 o 15 años, pero entonces todavía no había esa masa crítica para poder impulsar una feria. Sin embargo, esa realidad cambió en los últimos años.

Nosotros vimos que había ese hueco de ferias, y la creamos para apoyar, para contribuir a impulsar ese segmento. Este evento se presenta como una ocasión donde se pueden ver cosas nuevas, reunirse la gente, donde se comercializan determinadas ofertas. Eso es lo que son las ferias desde la Edad Media.

¿Cómo ha ido creciendo la feria desde la primera edición hasta ahora?

-El primer año tuvimos 5 mil metros y 100 expositores, el segundo año 11 mil metros y 180 expositores; y el año pasado sumamos más metros, pero hubo stands donde mucha gente se unió para venir juntos y la representación de marcas fue mayor que la segunda edición, aunque el número de stands era un poquito menor. Este año te reitero que reunimos a 347 expositores en 10 mil 800 metros cuadrados. También crecimos un 2,5 por ciento en visitantes, con 14 mil 592 personas recorriendo la feria.

¿Pudiera comentarnos un poquito sobre el programa de la feria, sus actividades principales?

-La feria tiene una parte que nosotros llamamos Programa Profesional de conferencias, y es una jornada que está dirigida a todos los que son gerentes de campos de golf, green keepers y gente que se dedica a lo que es el cuidado y gestión de los campos de golf y al turismo de golf.

Hacemos este programa de conferencias junto con la Federación española, y tratamos de que sean de interés y traten sobre problemas que tengan en este momento los gerentes y los green keepers; y luego tenemos alrededor de la feria un circuito de trece torneos de golf en todos los campos de Madrid, dirigido a los golfistas que quieran conseguir una invitación para la feria.

Dentro de la feria hay una serie de stands que son, como llamamos nosotros “zonas de ocio”, que están dirigidas al entretenimiento y donde los visitantes pueden incluso jugar, probar implementos. Tienen un área de mil metros cuadrados donde pueden probar palos, una zona comercial con tiendas, zonas de juego corto, desfiles de ropa de golf, conferencias en el escenario principal de la feria, clases de golf, zona tecnológica y toda una serie de cosas que hacen que el visitante pueda pasar un buen rato en la feria.

¿También va dirigido al aficionado base?

-¿Qué es el aficionado base?

El que quiere empezar, el que quiere saber qué es el mundo del golf.

-El que todavía no juega. Nosotros tenemos mucho interés en que la gente juegue golf, de manera que damos clases para principiantes, y también les favorecemos y les animamos a que vengan a la feria, porque allí hay mucha gente que no sabe dónde hay un campo de golf, no sabe cómo federarse; no sabe nada de golf. Sin embargo, en España todo el mundo sí tiene bien ubicada a IFEMA y saben cómo llegar hasta aquí.
En la feria decimos que pueden federarse, que pueden dar la primera clase de golf, llevar niños para que aprendan. Así que sí nos dirigimos al tipo de gente que tiene interés, pero todavía no juega golf.

Yo soy un poco mayor que usted, y recuerdo que en los años 50 el golf se practicaba en países como Estados Unidos y se consideraba un poco como deporte de gente más mayor, pero ahora ya ha cambiado la concepción.

-Yo creo que el golf es uno de los únicos deportes que los puedes practicar toda la vida: desde los cinco años hasta los noventa y cinco. No sé si en Estados Unidos la población que jugaba golf era mayor, pero yo creo que hay gente de todas las edades jugando al golf en la actualidad.

Aquí en España siempre se ha tenido al golf como deporte de élite, un deporte de gente rica. En estos momentos ese deporte se ha hecho más popular, más asequible en todos los sentidos.

-Yo creo que lo que pasaba es que no había campos de golf, y al no haberlos se convertía en algo elitista, porque no se podía jugar. Al construir campos y haber tantísimos federados, todo el mundo puede jugar al golf. De hecho, es mucho más barato que esquiar, que irse a cazar. Aquí, en la Federación, puedes jugar golf por 30 euros y puedes comprar un juego de palos para principiantes que cuesta 100 euros y te dura un año. Yo pienso que el tema del elitismo del golf se debía a que no había campos donde jugar.

¿Qué cantidad de golfistas calculan ustedes que habrá ahora mismo en España?

-Ahora mismo hay 240 mil federados y los que no están federados serán otros tantos.

La masa crítica de golfistas españoles que hay en este momento es mayor que la del turismo de golf.

-No. Han venido más de un millón de golfistas extranjeros a España.

¿Entonces es una fuente turística también?

-Sí. El producto turístico de golf en muchas comunidades autónomas es prioridad. En Andalucía llevan desarrollándolo desde los años 70, toda la costa del sol es la costa del golf, y las demás partes de España se están dando cuenta de que es un turismo de calidad, que es un turismo que no solo gasta dinero en el golf sino que va a cenar, compra cosas; es muy importante.

Encima, en España tenemos el clima, y eso facilita que puedan venir turistas hasta en enero cuando vienen de Suecia, Inglaterra, Alemania, de Noruega y aquí tienen sol. El turismo es una parte muy importante de la industria del golf.

El golf no es un deporte violento, y alguien me ha comentado que favorece la precisión, la tranquilidad; precisamente por el marco en que se juega…

-Jugar al aire libre sí que ayuda a relajarse, pero yo creo además que el golf tiene un componente que parte de que, como uno juega solo, contra uno mismo, realmente no tienes más contrincante que tú y el campo; te favorece porque permite comunicarse consigo mismo. Eso en algunos países se llama meditación, que es una manera de ir adentro; y yo creo que el golf tiene ese componente que hace que tú puedas relajarte y andar, no estás corriendo, estás completamente relajado. Entre eso y la manera en que compites que es contra ti mismo, poco a poco te vas relajando durante las cinco horas que estás en el campo.

¿Algún mensaje especial para los aficionados habituales, y para las personas que lleguen nuevas al golf?

-Los aficionados habituales ya saben donde se han metido. Es un sitio, como diría yo, un punto de no retorno, porque te engancha. A los que no juegan yo les diría que lo prueben, porque se puede empezar sin importar la edad que se tenga, es un deporte que se puede jugar en familia, que se puede jugar en todas las partes del mundo, que te produce muchas satisfacciones y muchas penas a veces; pero cuando juegas bien no sé si hay alguna experiencia que sea tan gratificante como cuando realmente juegas bien al golf. Les animo a que vayan a alguno de los muchos campos en Madrid o cualquier otro, que vengan a la feria porque ahí sí pueden recibir unas clases.

Esta es la pregunta que no se puede dejar de hacer en estos tiempos que corren, en estos tiempos de crisis. ¿Cómo ha afectado al golf el tema de la situación económica?

-Yo creo que la crisis ha afectado mucho al golf en el sector de la inmobiliaria. Había muchas promociones de casas con campos de golf, tantas que yo creo que había sobreofertas. Todo eso se ha afectado muchísimo, hay promociones pagadas y otras que no están en venta.

Pienso que la salida de la crisis en el mundo del golf es a través del turismo. En España, desde los años 60 y 70 se ha utilizado el turismo como vía para obtener ingresos y siempre era el turismo el que favorecía la balanza de pagos. Creo que en el golf es lo mismo. España tiene un clima que favorece muchísimo, tiene instalaciones, los mejores hoteles de Europa y yo creo que a través de turismo interior en este primer año, de movimiento entre las comunidades autónomas para ir a campos de golf. Luego yo considero que España puede ser un destino turístico importante en el golf, y es una manera para ir saliendo de la crisis.