Saludo entre Obama y Raúl Castro marcó la inauguración de la VII Cumbre de las Américas

El tema Cuba fue recurrente en los discursos de inauguración de la VII Cumbre de las Américas en el Centro de Convenciones ATLAPA, Panamá, que por primera vez reúne en un mismo entorno a los 35 estados del hemisferio.

El enviado especial del Sumo Pontífice, cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano, los secretarios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y de la Organización de Estados Americanos(OEA), Ban Ki-moon y José Miguel Insulza, y el presidente panameño Juan Carlos Varela, pronunciaron discursos en la sesión de apertura.

La ceremonia comenzó con el mensaje del Papa Francisco, en el que pidió a los gobernantes del continente superar las diferencias a través del diálogo.

"El reto de nuestro mundo es la globalización de la solidaridad y la fraternidad, en lugar de la globalización de la discriminación y la indiferencia, y mientras no se logre una distribución equitativa de la riqueza no se resolverán los males de nuestra sociedad", expresó.

Asimismo, hizo un llamado a atender el problema de la inmigración y a la disparidad de oportunidades entre unos países y otros, lo que influye en que muchas personas se vean obligadas a abandonar sus familias o se encuentren expuestas a la trata de personas, al trabajo esclavo o sean víctimas de abusos.

El Sumo Pontífice consideró que Panamá era un centro de encuentro entre las naciones del norte y del sur, el Océano Pacífico y el Atlántico, en la lucha por un nuevo orden de paz y justicia.

Seguidamente, el secretario general de la Organización de Estados Americanos, José Miguel Insulza,  precisó que la Cumbre tenía lugar en un momento en que estaban en desarrollo eventos con todo el respaldo de América, como la negociación de la paz de Colombia, las conversaciones entre Cuba y Estados Unidos para restablecer relaciones diplomáticas, el proceso electoral en Haití y los acuerdos entre Belice y Guatemala para avanzar hacia la superación de su histórico diferendo.

Por su parte, Ban Ki-moon, secretario general de la ONU, reconoció el hecho de que por vez primera logren reunirse los 35 países del hemisferio, y saludó la presencia de Cuba como un deseo de larga data, expresado por los mandatarios de la región y finalmente hecho realidad.

También hizo referencia a la histórica decisión adoptada por los Presidentes de Cuba, Raúl Castro, y de EE.UU., Barack Obama, de iniciar negociaciones para el restablecimiento de nexos diplomáticos, lo cual dijo está en total concordancia con la Carta de la ONU, que promueve las relaciones entre los Estados.

Por último, el Presidente de la República de Panamá, Juan Carlos Varela, quien antes saludó uno a uno, a los jefes de Estado y Gobierno y de delegaciones a su llegada al Centro de Convenciones ATLAPA, ofreció la bienvenida oficial a los participantes y apostó por una reunión que permita avanzar en los propósitos de integración y cooperación.

"Ha querido el destino que el istmo de Panamá y nuestro pueblo, sean nuevamente un punto de encuentro de nuestro continente como lo quiso el libertador Simón Bolívar en 1815", afirmó.

En la sesión inaugural se produjo uno de los momentos más esperados cuando los presidentes de Cuba, Raúl Castro, y Estados Unidos, Barack Obama, se saludaron durante esa ceremonia. La víspera, el mandatario cubano se reunió aquí con el presidente ejecutivo principal de la Cámara de Comercio de los Estados Unidos, Tom J. Donohue, para tratar temas de interés para los dos países, según se informó.