Todo lo que es crecimiento y desarrollo humano pasa por la comunicación

La Asociación Cubana de Comunicadores Sociales ha desarrollado por estos días en La Habana, su primer Festival de Comunicación Social. Al evento, que tiene lugar en los Salones del Hotel Nacional, han asistido personalidades nacionales e internacionales de la comunicación, la publicidad, el marketing y las relaciones públicas.

CND conversó con el invitado español Carlos Martínez Cabrera Peláez, licenciado en Derecho y Máster en Dirección de Empresas, director de El Sol, Festival Iberoamericano de la Comunicación Publicitaria, quien ha asistido como miembro de la Asociación Española de Agencias de Publicidad y presidente de la agencia creativa Contrapunto.

Martínez Cabrera impartió una interesante conferencia con el tema “La publicidad del siglo XXI, un camino de búsqueda de la eficacia”, que tuvo un impacto muy positivo en los asistentes al Festival.

¿Qué importancia le concede a la comunicación en el contexto latinoamericano?

-Para Latinoamérica la comunicación es importante como para cualquier otro lugar del mundo; la comunicación es indispensable, el ser humano se comunica y somos altavoces de ideas, y, por tanto, no solamente tenemos comunicación sino que yo creo que trabajamos en el mundo de las ideas, que pueden hacer un mundo mejor. Somos el gran altavoz para que la gente tenga una capacidad de encontrar nuevos sueños, nuevas necesidades y nuevos retos… Yo creo que todo lo que es crecimiento y desarrollo humano pasa por la comunicación.

En este momento histórico, Latinoamérica está dando un ejemplo de desarrollo. Cuando el mundo se encuentra en medio de una crisis general, Latinoamérica avanza.

-Es verdad, pero la historia te enseña que las crisis van y vuelven. España está pasando por una crisis brutal. Desde 2007 a 2013 llevamos seis años de crisis muy fuerte, y Latinoamérica está creciendo en doble digito de una manera espectacular. Para mí es una enorme alegría que esto suceda, pero lo que yo diría es que hay que prepararse para el futuro, porque el crecimiento no es para siempre y por lo tanto hay que aprender de lo que hemos hecho muy mal, por ejemplo, en España, para que el crecimiento sea más sostenido, más progresivo, más paulatino, y más consistente.

¿Y qué podemos hacer los comunicadores para salir de este agujero?

-Pues seguir presionando, primero ser capaces de hacernos un cambio. Los publicitarios somos resistentes al cambio. La nuestra es teóricamente una profesión moderna, pero sigue siendo como se estructuró hace decenas de años y nos cuesta mucho cambiar porque hemos tenido muchos privilegios y no somos conscientes de que tenemos que tener privilegios para aprender a generar algo nuevo; esto no se trata de un cambio de época, sino de un cambio de mentalidad muy grande. Además, creo que la crisis viene para quedarse; por lo tanto, no vale esperar un gran cambio, sino que lo tenemos que dar nosotros y es nuestra realidad.

Sobre Contrapunto como agencia…

-Es una agencia de creatividad, fundamentalmente. Nació en 1974 y fue la primera agencia española que ganó el Gran Premio del Festival Publicitario de Cannes para TVE. Pero, sobre todo, es una de las agencias que ha acumulado más campañas de éxito y de gran impacto.

¿Su posición en el mercado latinoamericano les da alguna tendencia para aplicar en Europa?

-En España estamos ahora mismo creando una experiencia. Hay algunas compañías españolas que se están esparciendo mucho por Latinoamérica, como son Telefónica, Santander, BBVA, Repsol, y lo que se están creando son redes de comunicación; yo creo que lo que ha sucedido en España es de entender muy bien la idiosincrasia de algunos países, incluso a veces no está la marca y de lo que se trata es de buscar sinergias, pero tratando de comenzar mucho el espíritu local, global pero local.

¿Existen diferencias importantes en las redes sociales de América Latina y en Europa, en España…?

-En España están muy desarrolladas, el boom es brutal, fruto de la generación de  jóvenes y la de los 30 años, es una vorágine y muestra una velocidad espectacular en términos de crecimiento. Y lo que estamos aprendiendo por una parte en comunicación, es cómo hacerlo más útil para la marcas y por otra parte los propios medios cómo hacen para que sea económicamente más rentable.

Has venido a Cuba por segunda vez, me decías. ¿Qué te ha parecido este país, desde la imagen que traías preconcebida?

-Qué me está pareciendo… Yo soy un hombre sin ideas preconcebidas. Yo digo que satisfacer las expectativas es una realidad, las expectativas son las que encuentro y la realidad las supera ampliamente; por lo tanto, estoy muy satisfecho con este encuentro.

En un Festival como este, de comunicadores, con más de 300 personas, ¿esperabas un quórum de estos niveles?

-No, esperaba que fuéramos menos. Creo que hay una ilusión y una curiosidad grandísimas; la presidenta de la Asociación y algunos miembros están ávidos de conocer y yo encantado de traer mis experiencias y compartirlas y al tiempo de aprender mucho de la cultura y de la posición que aquí tienen en términos de comunicación.