Afganistán lanza polémica campaña turística que simula un video de rehenes
Una serie de videos producidos por la agencia Raza Afghanistan, con sede en Kabul, ha causado conmoción en redes sociales y medios internacionales por utilizar la estética de videos de rehenes para promover el turismo en el país.
En una de las grabaciones, tres hombres aparecen con bolsas negras en la cabeza, custodiados por hombres armados, en una escena que recuerda inquietantemente a los videos de ejecuciones del ISIS. Sin embargo, tras un momento de tensión, uno de los "rehenes" sonríe, levanta el pulgar y dice: “Bienvenidos a Afganistán”, mientras el video cambia a paisajes montañosos y tomas de combatientes talibanes armados.
El material, titulado “Mensaje a América”, ha sido comparado con el infame video de 2014 en el que el periodista James Foley fue mostrado como rehén antes de ser asesinado por ISIS en Siria. No obstante, el objetivo de los videos, según su creador Yosaf Aryubi —fundador de la agencia y ciudadano estadounidense—, es romper estereotipos y mostrar “la realidad” de Afganistán como destino turístico.
A pesar del tono provocador, Aryubi afirma que los turistas que aparecen en las imágenes son reales, provenientes de Estados Unidos y Canadá. En entrevistas posteriores, agradeció la cobertura mediática que ha generado viralidad para la campaña.
Sin embargo, la ausencia total de mujeres en los videos ha sido señalada como un reflejo de la actual situación en el país, donde el régimen talibán ha eliminado a las mujeres de la vida pública, prohibiéndoles asistir a escuelas, trabajar, circular sin un acompañante masculino e incluso cerrar los salones de belleza.
Paradójicamente, mientras las mujeres afganas enfrentan severas restricciones, algunas turistas extranjeras han reportado cierto grado de libertad durante sus viajes, aunque se les exige el uso de pañuelo en la cabeza. El número de visitantes extranjeros ha crecido notablemente: de 691 en 2021 a más de 9,000 en 2024, según cifras oficiales. Parte de este aumento se debe a la tendencia del turismo oscuro, que atrae a viajeros en busca de experiencias extremas en zonas de conflicto.
El gobierno talibán, por su parte, ha visto en el turismo una oportunidad económica. El viceministro de Turismo, Qudratullah Jamal, declaró a Associated Press que esperan que esta industria “se convierta en un pilar económico importante para el país”.




