Londres y otras ciudades del Reino Unido planean aplicar un impuesto turístico nocturno
Viajar al Reino Unido podría ser más costoso muy pronto. Londres, Manchester y otras ciudades británicas avanzan hacia la implementación de un impuesto turístico nocturno que se aplicará a quienes se alojen en hoteles, viviendas turísticas, bed and breakfasts y casas de huéspedes, como parte de una estrategia para financiar mejoras urbanas y fortalecer la competitividad del destino.
Según confirmó el Gobierno británico, este nuevo cargo situaría al Reino Unido en línea con grandes ciudades como Nueva York, París o Milán, donde los gravámenes a pernoctaciones son una práctica habitual. Un estudio de la Local Government Association sugiere que el impuesto podría definirse como una tarifa fija por noche, un porcentaje del costo del alojamiento o mediante un modelo híbrido.
Los fondos recaudados se destinarán directamente a proyectos comunitarios, como infraestructura pública, mejoras en el transporte, mantenimiento de zonas de alto tránsito turístico y embellecimiento urbano. “Queremos que los alcaldes dispongan de herramientas para seguir impulsando el crecimiento y reinvirtiendo en sus comunidades”, señaló Steve Reed, secretario de Estado de Vivienda, Comunidades y Gobierno Local.
En Londres, el alcalde Sadiq Khan celebró la medida, afirmando que el impuesto “respaldará directamente la economía londinense” y ayudará a consolidar la reputación de la capital como un destino global de turismo y negocios. Khan destacó que trabajarán junto al sector hotelero y turístico para garantizar que el nuevo esquema beneficie tanto a las empresas como a los visitantes.
El alcalde de Greater Manchester, Andy Burnham, compartió una postura similar, asegurando que la recaudación permitirá “mantener un crecimiento sostenido durante la próxima década” mediante servicios esenciales como calles más limpias, más transporte nocturno y mejoras que brinden “experiencias positivas y memorables” a los viajeros.
El proyecto se encuentra actualmente en fase de consulta pública, un proceso que se extenderá hasta el 18 de febrero de 2026. Si se aprueba, el Reino Unido se sumará a una lista creciente de destinos que implementan medidas de gestión responsable del turismo. Japón prevé aumentar su impuesto de alojamiento en Kioto desde marzo de 2026, mientras que Venecia aplica tanto una tasa nocturna como un cargo para visitantes de un solo día, con el fin de controlar el exceso de turistas.
A medida que más ciudades buscan equilibrar crecimiento turístico y sostenibilidad, el avance del Reino Unido refleja una tendencia global hacia modelos de gestión turística responsable, una variable que los viajeros deberán considerar en su planificación futura.