Ana Larrañaga, Directora de FITUR

La mayor feria turística de España y una de las primeras a nivel mundial, cumple en esta edición 29 años. FITUR se ha consolidado como evento, incorporando en su convocatoria todos los modelos turísticos que han venido surgiendo, y moldeándose para adecuarse a la evolución del sector, para hacerse cada vez más necesaria y madura.
Por eso, esta nueva cita, que acontecerá en un momento de verdadera crisis mundial, sigue contando con el apoyo de los operadores y entidades del sector turístico nacional e internacional, y de los organismos gubernamentales. Esa historia, y estos respaldos, le auguran otra exitosa edición. Así también lo considera su directora, Ana Larrañaga.
A casi 30 años de la primera edición de FITUR, ¿cuál es su valoración de cómo ha avanzado y evolucionado la feria desde sus inicios?
-Desde su primera edición, en 1981, los operadores turísticos nacionales e internacionales nos han dado su apoyo, así como los organismos y entidades del mundo empresarial que configuran el sector turístico; y desde la segunda, la Casa Real ha estado inaugurando y apoyando con su presencia este sector estratégico.
Durante estos años, la feria ha ido incorporando en su convocatoria todos los modelos turísticos que han venido surgiendo, moldeándose para adecuarse al sector. En este breve resumen, no debemos olvidar que al apoyo de la industria se une la gestión de IFEMA, que convoca esta feria, y que en estos años ha procurado atender las necesidades del sector y recogerlas con la mayor eficacia.
En comparación con las primeras ediciones ¿qué indicadores tenemos hoy?
-De unas 2.000 empresas reunidas en su primera edición, llegamos a más de 13.000 en el 2008, y de 25 países a 170, lo que es un crecimiento muy destacado. No debemos olvidar que en sus inicios, Fitur duraba muchos más días, con una connotación más de público, que de profesionales.
En cambio hoy, tiene sus primeros días dedicados a profesionales del sector y sólo el fin de semana para el público. Por tanto, ahora tiene un marcado carácter mixto enfocado más sobre la industria, que representa casi 12 % del PIB, uno de los mayores de España.
Hoy que el mundo se enfrenta a una crisis financiera, cuando público y empresas reducen gastos y son más cautos con los dispendios para viajes ¿cómo puede afectar a FITUR la retirada de compañías importantes, y cómo puede contribuir la feria a que no se detenga el desarrollo del turismo?
-A pesar de enmarcase en un momento difícil, es alto el por ciento de ocupación, con un sustancial aumento de la presencia internacional, que este año significará el 45 % de la participación total.
En cuanto a regiones del mundo, Europa ha bajado un poco en el área de empresas, pero se mantiene. En cambio, el mayor incremento para esta edición ha sido del continente americano y Asia. En el primero, la presencia ha crecido un 5 %, y en Asia en torno a un 10 %. En los últimos cinco o seis años, los mercados asiáticos han destacado por su crecimiento. De hecho, ha aumentado este año el número de expositores provenientes de áreas geográficas que ya estaban participando, como India, Bután y China.
En los últimos tres años, de manera más pausada pero continuada, ha crecido también la presencia del África sudsahariana. En este continente además, este año tenemos algunos destinos, como Mozambique por citar uno, en los cuales está comprometida la fundación Banesto, para trabajarlos desde el punto de vista del turismo responsable.
Es cierto que la economía afecta a todos los sectores, nadie puede estar aislado de esa realidad. No obstante, yo pienso firmemente -porque los datos están ahí-, que la gente no va a dejar de viajar.
Debe enfatizarse también que hay 725 empresas directas, que en esta situación complicada para todo el mundo, han apostado una vez más por FITUR como el principal foro de promoción y proyección comercial.
Aún en el entorno económico actual, el turismo se mantiene fuerte, especialmente si se compara con el efecto que la desaceleración está teniendo en otras industrias.
¿Y con relación a la presencia de las comunidades españolas?
-Hay que destacar positivamente la participación de las comunidades autónomas, porque significa la sensibilización de las administraciones hacia esta actividad y lo que representa en beneficios para sus comunidades.
A veces leo en la prensa críticas sobre la presencia de los políticos, y yo digo qué bien que hayan venido, porque eso significa que saben lo importante que es la feria para sus destinos, y al venir se comprometen a que el turismo siga siendo una fuente de riqueza para esas regiones o municipios.
Creo que es digna de reconocimiento la sensibilización de los responsables administrativos que se preocupan por esto, pues no es sólo hacer un parque temático, edificar hoteles o atracciones, hay que atender al cliente con transporte, agua, energía, servicios sanitarios, por tanto, la administración tiene un papel clav, y tiene que intervenir para que eso funcione con un servicio de calidad; y si está aquí en la feria, demuestra que es sensible y está comprometida.
¿Entonces, a casi 30 años de su primera edición podemos decir que FITUR no sólo está consolidada, sino en plena evolución de madurez?
-Fitur se consolidó desde sus primeras ediciones, con todo el respaldo de los operadores turísticos y de la Casa Real, que siempre nos ha apoyado, pues es lo mismo que apoyar a la industria. Es la primera de las citas internacionales importantes que arranca en el año y marca pautas de lo que va a ser la industria en los meses subsiguientes.
Atendiendo a los datos de participación, Fitur es una de las primeras en el ranking internacional de ferias; y si hablamos desde el punto de vista del encuentro para hacer negocios, es un escenario excelente, porque concentra un enorme número de profesionales del sector, de los medios, del transporte, políticos incluso; y constituye por eso un encuentro de los responsables del turismo, de la comunicación, la legislación, la comercialización, la regulación, los desarrollos, en mercados maduros o emergentes, lo que configura una magnífica oportunidad de establecer contactos y estrategias para el futuro.
¿Es precisamente por esa masividad que FITUR ha pasado del control manual al automatizado, incorporando sistemas informáticos cada vez más eficientes?
-Sin duda, hemos optimizado nuestra gestión con las nuevas tecnologías para tener un contacto mucho más personalizado y directo con expositores y visitantes, para que sea mucho más interactivo. El éxito de una feria estriba grandemente en su preparación; hay que fijar objetivos y establecer estrategias para conseguirlos.
A partir de ahí, la feria es co-responsable de que expositores y visitantes puedan llevar a cabo sus encuentros y alcanzar los objetivos propuestos con la mayor agilidad. Para facilitarlo, a través de FITUR online se dispuso de una serie de herramientas y programas que permiten saber quién está registrado y así organizar una agenda de modo más eficaz, utilizando los puntos de información y preparando una guía de visitas en función de determinados clientes, actividades o productos.
Con respecto a las conferencias ¿habrá este año alguna novedad en los temas?
-Hay un extenso programa, que puede redundar en resultados muy productivos, con temas novedosos e interesantes como el marketing online.
Una feria no sólo es un foro comercial, y lleva implícita una parte de información. Se enriquece y favorece la toma de decisiones cuando hay una formación adecuada, por eso estas jornadas pretenden contribuir a formar, desde el caso concreto de experiencias prácticas, y todo conduce a cumplir objetivos comerciales.
Somos conscientes de que la formación es fundamental, y por eso estamos trabajando desde casos prácticos, desde la experiencia; sin olvidar que hoy hablar de formación, es también hablar de innovación.
¿Algún mensaje final para los lectores y participantes de la feria?
-El mejor que puedo darles es que el turismo es una de las necesidades que nunca van a desaparecer de los intereses humanos, y aunque en un momento determinado pueda ralentizarse un poco, nunca va a dejar de existir demanda, hay mucho futuro y crecimiento por delante, muchos mundos por descubrir y visitar.