Estados Unidos: Aerolíneas buscan alternativas ante competitividad del mercado doméstico
Estados Unidos. En su afán por compensar las dificultades del competitivo mercado doméstico, algunas aerolíneas de este país han comenzado a surcar otros cielos internacionales menos explotados. "Hacer énfasis en las rutas internacionales es una tendencia cada vez más acentuada", dice Daniel Petree, decano de la Escuela de Negocios de la Universidad Aeronáutica Embry-Riddle, en Daytona Beach, Florida.
Northwest, por ejemplo, anunció el año pasado nuevos vuelos principalmente a Europa -Amsterdam (Holanda), Bruselas (Bélgica) y Dusseldorf (Alemania)-, y otros destinos que se han ido añadiendo en los últimos meses.
Por su parte, Delta Airlines, que en 1996 sólo contaba con tres destinos en Latinoamérica y el Caribe, ofrece ahora 700 vuelos semanales a 63 puntos (en 29 países) de esta región, una de las principales, pero no la única, en la que se ha enfocado su ampliación desde que la compañía saliera de la bancarrota en abril pasado.
United Airlines, a pesar de su importante presencia en el mercado norteamericano, tiene también puestas sus miras en Asia. Es por eso que la compañía acaba de inaugurar un nuevo vuelo Washington-Beijing, y planea añadir otro entre Los Ángeles (LAX) y Hong Kong este otoño, además de haber solicitado aprobación para otro con destino a Shanghai (también desde LAX).
"Aunque la globalización de los mercados aéreos está lejos de conseguirse, porque todavía están altamente regulados por las políticas domésticas de cada país o región, el hecho de que Estados Unidos sea la potencia mundial en esta industria le da una ventaja competitiva a la hora de surcar los cielos internacionales", señala Petree.
A pesar de que en el ámbito internacional la competencia entre aerolíneas estadounidenses está también aumentando, sumándose a la existente por parte de las compañías aéreas que dominan en cada país, el mercado se encuentra todavía lejos de saturarse, según Petree.
Tony Batista, director de ventas para América Latina de Delta Airlines, indica que, por el contrario, eso sí llegó a suceder en los servicios nacionales.
"Llegamos a un punto en que el número de asientos excedía con mucho al de pasajeros", dice Batista, agregando que actualmente el 50% de los vuelos de su compañía es internacional, y el objetivo es incrementarlos en un 10%, hasta conseguir un equilibrio 60%-40% (vuelos internacionales, y nacionales respectivamente), que se compara con el de 80%-20% que existía en Delta antes de iniciar la estrategia de internacionalización.
Según Delta, los resultados del verano fueron "muy buenos". Tan sólo en junio la compañía registró un aumento del 22% en el número de pasajeros a Latinoamérica.
Brasil, Perú, México y América Central figuran entre los destinos más exitosos para la compañía.
Animadas por el éxito de las aerolíneas que actualmente operan en cielos internacionales puede que otras se aventuren pronto en este territorio.
Por ejemplo, Southwest, aerolínea que hasta ahora cubre el ámbito doméstico, planea iniciar pronto vuelos a destinos internacionales cercanos como México, Canadá y el Caribe, según indica su portavoz Edna Ruano.
"La expansión internacional es simplemente una respuesta a los fundamentos del mercado", explica Petree. "Se trata de atender la demanda donde existe… hay mucho campo todavía antes de llegar a la saturación".
Petree comenta que hasta ahora países muy extensos como Brasil se han servido básicamente de sólo dos puntos principales de entrada y salida como Sao Paulo y Río. Lo mismo puede decirse de otros países con gran tráfico de viajeros desde y hacia Estados Unidos.
"Por eso ahora las aerolíneas están encontrando destinos más creativos que no se limitan a la capital y a una o dos ciudades importantes", apunta Petree, señalando que eso abre un buen horizonte de oportunidades para las aerolíneas estadounidenses.