Puerto Rico se esfuerza por mantener condición como capital del turismo ecológico en el Caribe
Puerto Rico. Los continuos esfuerzos y estrategias desarrolladas en este país para promover las mejores prácticas de sostenibilidad, conservación del medioambiente y preservación de la cultura autóctona, han convertido a la isla en la Capital del Ecoturismo en el Caribe. Esta nación es pionera en esos empeños desde el año 2006, cuando aprobó una avanzada legislación de desarrollo sostenible, y desde entonces ha llevado a cabo una gran variedad de proyectos que la sitúan a la vanguardia del turismo ecológico y de naturaleza en la región.
La ley de Política Pública para el Desarrollo Sostenible del Turismo en Puerto Rico tiene como objetivo principal propiciar el turismo responsable como un instrumento de educación y concienciación con el fin de conservar, apreciar y experimentar los recursos naturales, culturales e históricos valiosos del país, se refiere en un comunicado de prensa enviado a esta redacción.
Entre las iniciativas de desarrollo sostenible implantadas por la Compañía de Turismo de Puerto Rico se encuentran el proyecto eco turístico de la Reserva Natural de Humacao, el plan estratégico para el desarrollo turístico sostenible de Utuado; el Catálogo de Propiedades, que identifica a aquellas con alto potencial turístico con el fin de desarrollarlas, el programa de certificación de playas Bandera Azul, o las escuelas eco turísticas.
Estas iniciativas confirman la voluntad de la Compañía de Turismo de Puerto Rico de proteger los recursos naturales de una isla que cuenta con un alto potencial turístico por calidad y variedad: hacer trekking en Cerro Punta, el pico más alto de Puerto Rico; cabalgar las olas haciendo surf en la playa de Rincón; nadar una noche sin luna en la bahía bioluminiscente de Vieques; bucear en Cayo Diablo o nadar entre coloridos peces, anguilas "moray" o manatíes, son algunas de las propuestas de actividades vinculadas al turismo activo y de naturaleza que ofrece la Isla.
Los que quieran quedarse en la superficie, pueden practicar surf, windsurf o kayak. Los más tranquilos pueden disfrutar también de la pesca en alta mar. Para los que prefieran sumergirse a descubrir los secretos del fondo marino, en la costa del sudoeste de la isla, desde el área de La Parguera hasta la ciudad de Ponce, existen algunos de los sitios más extraordinarios para la inmersión de la isla. La Pared Negra (Black Wall) es el hogar de un coral negro raramente visto en el Caribe y en Hai Lite puedes bucear entre enormes meros, peces trompeta y esponjas gigantes. La Isla de Mona, en el oeste, es el hogar de las iguanas de tres-pies, tortugas de mar, delfines y peces espada.
Aquellos que opten por quedarse en tierra pueden practicar senderismo por reservas naturales, como el bosque de Toro Negro, localizado justo al norte de Ponce, donde los caminantes pueden ascender al Pico de Doña Juana. El bosque pluvial El Yunque, en el noreste de la isla, ha sido declarado reserva de la biosfera del mundo por las Naciones Unidas y cuenta con muchos kilómetros de caminos perfectamente habilitados para el trekking, múltiples cascadas naturales y más de 26 especies diferentes de animales.